Tobillos como buñuelos: ¿Por qué se hinchan y qué hacer?

31 Mar 2024

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¿Has sentido tus tobillos como si hubiesen pasado la noche en remojo? Esa molesta hinchazón, que a veces parece que puede hacer explotar tus calcetines, puede ser síntoma de varias cosas, desde algo tan simple como estar mucho tiempo de pie hasta algo que requiere la atención de un médico.

Antes de que te asustes y empieces a buscar vuelos a Lourdes, respira hondo. En este artículo, vamos a desmenuzar las causas más comunes de la hinchazón de tobillos, cuándo preocuparse y qué puedes hacer para aliviar la situación y volver a lucir esos tobillos de infarto.

Lo primero que debes saber es que la hinchazón en los tobillos, también conocida como edema, ocurre cuando se acumula un exceso de líquido en los tejidos de esa zona. Es como si tus tobillos se convirtieran en esponjas sedientas que absorben todo el líquido que encuentran a su paso.

Las causas pueden ser tan variadas como los ingredientes de una paella. Entre las más comunes se encuentran estar mucho tiempo de pie o sentado, el calor que dilata los vasos sanguíneos, el consumo excesivo de sal que nos deja como un bacalao en salazón, el sobrepeso que somete a nuestras articulaciones a un trabajo extra, y algunos medicamentos que pueden tener este efecto secundario.

Pero ojo, la hinchazón de tobillos también puede ser un síntoma de algo más serio, como problemas circulatorios, enfermedades renales, problemas de tiroides o incluso una reacción alérgica. Por eso, es importante prestar atención a otros síntomas que puedan acompañar a la hinchazón, como dolor, enrojecimiento, dificultad para respirar o fiebre. Si experimentas alguno de estos síntomas, lo mejor es que consultes a un médico para que te haga un chequeo y descarte cualquier problema grave.

¿Cuándo preocuparse por la hinchazón de tobillos?

Si bien en muchos casos la hinchazón de tobillos es un problema pasajero que se puede aliviar con medidas sencillas, hay situaciones en las que es importante acudir al médico. Presta atención a estos signos de alarma:

Hinchazón repentina y dolorosa, especialmente si se acompaña de enrojecimiento y calor en la zona.
Dificultad para respirar o dolor en el pecho.
Fiebre.
Hinchazón en una sola pierna, acompañada de dolor en la pantorrilla.
La hinchazón no mejora con medidas caseras después de unos días.

Consejos para aliviar la hinchazón de tobillos

Si la hinchazón de tobillos no se debe a una causa grave, hay varias cosas que puedes hacer para aliviar la molestia:

Eleva las piernas: cuando estés sentado o acostado, coloca almohadas debajo de tus piernas para elevarlas por encima del nivel del corazón. Esto facilita el retorno venoso y ayuda a reducir la hinchazón.
Reduce el consumo de sal: el exceso de sodio en la dieta hace que tu cuerpo retenga líquidos. Opta por alimentos frescos y limita el consumo de productos procesados, que suelen ser ricos en sal.
Mantente activo: el ejercicio físico, incluso caminar durante 30 minutos al día, ayuda a mejorar la circulación sanguínea y reducir la hinchazón.
Usa medias de compresión: estas medias ejercen presión sobre las piernas, lo que ayuda a mejorar el retorno venoso y prevenir la acumulación de líquidos.
Mantente hidratado: aunque parezca contradictorio, beber suficiente agua ayuda a eliminar el exceso de líquidos y toxinas del organismo.

Preguntas frecuentes sobre la hinchazón de tobillos

Aquí respondemos a las preguntas más comunes sobre la hinchazón de tobillos:

¿Es normal que se me hinchen los tobillos durante el embarazo?

Sí, es bastante común que las mujeres experimenten hinchazón en los tobillos y los pies durante el embarazo, especialmente en el tercer trimestre. Esto se debe a que el cuerpo produce más sangre y líquidos para satisfacer las necesidades del bebé en crecimiento. Además, el útero en expansión ejerce presión sobre las venas, lo que puede dificultar el retorno venoso.

¿Cuándo debo preocuparme por la hinchazón de tobillos durante el embarazo?

Si experimentas hinchazón repentina o excesiva, especialmente si se acompaña de dolor de cabeza intenso, problemas de visión o dolor abdominal, contacta a tu médico inmediatamente. Estos pueden ser signos de preeclampsia, una complicación grave del embarazo.

¿Qué puedo hacer para aliviar la hinchazón de tobillos si estoy embarazada?

Además de los consejos generales para aliviar la hinchazón de tobillos, las mujeres embarazadas pueden beneficiarse de:

Dormir de lado, preferiblemente del lado izquierdo, para reducir la presión sobre las venas.
Usar ropa cómoda y holgada que no restrinja la circulación.
Evitar estar mucho tiempo de pie o sentada.
Elevar los pies siempre que sea posible.

Recuerda que la información proporcionada en este artículo es solo para fines informativos y no debe considerarse como un sustituto del consejo médico profesional. Si tienes dudas o preocupaciones sobre tu salud, consulta a un profesional de la salud cualificado.

En definitiva, la hinchazón de tobillos es una condición común que puede tener múltiples causas. Si bien en muchos casos se puede aliviar con medidas sencillas, es importante prestar atención a los signos de alarma y buscar atención médica si es necesario. Recuerda que la prevención y la atención temprana son fundamentales para mantener una buena salud.